lunes, 6 de febrero de 2012

Mis recuerdos de niñez, siempre buscando que innovar. (Parte II)

Me recuerdo que primero empecé a cocinar (después de buscar y buscar en la refrigeradora de la casa) eran cortes diferentes de carne de res. Comprendí que había varios cortes de carne que yo ni podía ni sabía como identificar. Pensar esto no solo me dio curiosidad si no también frustración. Lo único que podía hacer era hornear o poner la carne en la barbacoa y tratar de no quemarla, podía dejarla o tipo chancleta o demasiada cruda, cualquiera de los extremos…
No tenia idea de lo que estaba haciendo y aun así me divertía. Cuando era hora de empezar a buscar una carrera, yo solo en eso pensaba… Cuanto me gustaba cocinar y no sabía nada.  Quería aprender de cocina, aunque solo fuera para cocinar una fiesta en mi casa o para una cena para mi novia o esposa algún día. La idea de vestirme en saco, corbata y pasar atrapado en una oficina en un edificio grande no me agradaba mucho… Siempre mi sueño era jugar con fuego y cuchillos cualquier día…
En Escuela de cocina yo era el menor de la clase, solamente tenia 18 años, en comparación al alumno mayor de 69 años que había sido un piloto en la fuerza aérea griega… Para mi, todito lo que veía en la escuela era nuevo. Habían proteínas nuevas, verduras nuevas, vinos, infinidad de productos secos y harinas, café, maquinaria con que trabajar, libros, etc.… Había mucho para estimular el apetito y también la mente de un cocinero… Yo solo había trabajado cortando grama en los veranos y en una ferretería como cajero. Aprender de comida y la cocina era un mundo totalmente diferente a lo que yo estaba acostumbrado. Lo amaba…
Al principio, como todo cocinero, yo no sabía cocinar nada y el arte de cocina era algo muy misterioso para mí. En estos días no había muchos Chef famosos y la carrera de Chef era muy secreta y era casi solo para gente sin educación, de problemas en el pasado, inmigrantes indocumentados o cualquiera que no podía conseguir trabajo. Recuerdo que mas del 90% de los compañeros míos en los nueve años que trabaje en Washington DC eran de ese perfil. Es muy raro encontrar alguien con título universitario, culto y buena persona…   Las cocinas de restaurantes en todo el mundo, son un verdadero mundo aparte, pueden ser bonitas, pero generalmente son lugares duros, con gente difícil y llenos de problemas…
Mi primer jefe, después de la escuela de cocina, me decía que tener un restaurante era como ser Capitán de un Barco Crucero donde todos los cuartos se están incendiando, a unos cuartos se puede entrar y apagar el fuego, pero a otros, solo se abre la puerta, contiene el fuego, y vuelve a cerrar para ver que diablos hace mas tarde.  

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